Yo soy mis libros, mi escritura, mi música.
soy el pedacito que dejé en tu corazón,
los recuerdos que perdieron la razón
las señales que te hicieron única
yo soy yo, y mi adentros
el pasado que hizo mella
las cenizas de los recuerdos
grabados a fuego sincero
Existencia en estado puro
a veces carencia de mi escudo
Náusea, yo sum
ergo viene el súmmum
Escritos de este escritor que escribe cuando la luna vive y el sol yace entre páginas de mimbre.
miércoles, 18 de julio de 2012
Confesiones
Tráeme el fuego del infierno
no asiduo en el cielo
que viene con lo eterno
yo le ofreceré consuelo
Aparta las elevadas cargas
que vienen con recelo
los rostros de un te quiero
no fueron más que tu deseo
El aleteo de la pluma
acarrea con la duda
de saber si esta noche
seguirá atada o caerá en locura
Por no saber que hacer
por tener que cavilar siempre desnuda
la mar le hizo saber
que no toda herida tiene cura
No toda palabra no es muda
no nada siempre perdura
la nada está en lo cierto
el todo es absoluto
Locura transitoria o el dolor de la memoria...?
Siniestro lastre con el que se topó ese ser cuando las nubes le acechaban al amanecer. No sólo quiso enfrentarse a él, si no dedicarle unos versos para hacerle ver su equivocación respecto a ese eclipse. Sólo los locos podían entenderse, él, asomando la cabeza por la rendija de esa dualidad, quiso ir hacia un lado, pero la cuerda lo ató advirtiéndole otra vez que si volvía a cruzar la línea no volvería a ser miembro de su propio ser. Él, caviloso, esperó unos instantes y seguidamente respondió:
"El miedo al temer la cuerda es el que no me ha dejado ser yo mismo, no puedo negarme a esta decisión estaría negando parte de mi"
Seguidamente cruzó la línea.
"El miedo al temer la cuerda es el que no me ha dejado ser yo mismo, no puedo negarme a esta decisión estaría negando parte de mi"
Seguidamente cruzó la línea.
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